¿Quién soy?
Me llamo Manuel Iriarte. Estoy en proceso de descubrir quién soy. Estoy conociéndome y amistándome cada vez más conmigo mismo. Hermann Hesse dijo que la vida de toda persona es un camino hacia sí misma. Cada vez encuentro más verdad en esas palabras. ¡Qué lindo proyecto es el del autoconocimiento!
Puedo decir, con alegría y con orgullo, que me he transformado. He pasado de vivir en la oscuridad a encontrar la luz. Mi luz. He pasado de los vicios y los malos hábitos al autocuidado y a la sanidad. De estar enemistado con la vida a enamorarme de ella. Del victimismo a la responsabilidad. De la queja a la gratitud. De la apatía al deslumbramiento. De la carencia a la abundancia. La vida, por supuesto, sigue siendo desafiante y por momentos se torna difícil. El hecho de que me haya transformado no quiere decir que ahora la vida sea siempre color de rosa. Pero sí quiere decir que ahora la navego de otra manera: con amor, belleza y responsabilidad. Y este proceso, que requiere de un trabajo diario, me ha mostrado que es posible vivir desde la expansión y desde la alegría. Depende de cada uno de nosotros hacer que nuestras vidas sean mágicas y poderosas.
De alguna manera, he renacido- como el Fénix- de las cenizas. Y me he dado cuenta de que el camino recorrido, con todo lo que he atravesado, tiene un propósito. Cada cosa ha sido necesaria para poder estar donde estoy hoy. Cada lucha ha valido la pena. Cada obstáculo superado ha significado la obtención de una nueva herramienta. Y todo lo anterior cobra verdadero sentido si logro ponerlo al servicio de los demás. Si puedo hacer que lo que he transitado- y lo que transito- sea útil y beneficioso para mejorar la vida de otros, entonces habré entregado algo valioso al mundo.
Este deseo de servicio es lo que me trae al desarrollo personal, particularmente al Coaching. He descubierto que el Coaching es la plataforma perfecta desde la cual quiero y puedo poner al servicio de los demás mi experiencia, mis conocimientos y mi humanidad. Es, además, un vehículo a través del cual puedo hacer un uso poderoso de la filosofía, que es mi carrera profesional.
Así que ¡bienvenidos y bienvenidas! Estoy a tu servicio para que descubramos juntos tu poder y tu valía. Para que te enamores de ti y de la vida. Para que eleves tu autoconfianza, para que encontremos la magia y la alegría de esta existencia.
¡Mucho amor!
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